Rafael del Barco Carreras
Cuando leo artículos como el de EL CONFIDENCIAL de f. 15-08-09 se me ocurre que en lugar de CALIFORNIA podría leerse CATALUÑA, pero mi hipócrita país no admite verdades tan contundentes. El HACHÍS, prensada resina o polen de cannabis, con o sin la hoja, marihuana, para la sociedad barcelonesa es un producto “marginal” a ignorar.
FUMAR HIERBA PUEDE SALVAR A CALIFORNIA DE LA BANCARROTA, reza el título.
Está claro que más allá de recalcitrantes sembrando en terrazas y macetas, aquí no se produce, pero que CATALUÑA es el eje central, consumidor, gran mayorista y almacén, entre MARRUECOS (su producto estrella, la mitad de la producción mundial, con CASI UN MILLÓN de ocupados y cobertura de su deficientísima balanza exterior), el Sur Español y EUROPA, no me cabe la menor duda. ¿Cabe mejor justificación para la DELEGACIÓN, OFICINA DE REPRESENTACIÓN O EMBAJADA DE CATALUÑA EN MARRUECOS que toda la parafernalia secreta, inconfesable y de cobertura que conlleva el tráfico?
Conocí en La Modelo por los 80 desde viejos legionarios a traficantes. O en Gerona por los 90, con cueva, raíles y furgonetas para el desembarco en Lloret. Y ya en los 2000, quienes amparados por “coroneles” de la Guardia Civil, obviando las peligrosas costas andaluzas, directos al litoral catalán. Mínimo miles de kilos. Buques nodriza. Cientos de casos. Compartí celda o patio desde con el "cojo", llenando su pierna ortopédica, y recorriendo Europa en moto, hasta el carnicero con 1000 kilos en la trastienda. Sin olvidarme del camionero que juraba le detuvieron en el peligroso peaje de Martorell con más quilos de los citados en el sumario.
Pero no solo en La Modelo, Brians o Gerona… el movimiento legalizador y terapéutico californiano tiene aquí el mismo predicamento, y no seré yo que quite y ponga razón, cuando de ordenanza (repartiendo comida) en la enfermería de BRIANS observé la placidez de los terminales de SIDA. ¡Y cuidado, no fumo ni tabaco!
Mi contable mentalidad sumaba precios iniciales en KETAMA o por el Rif, en Barcelona, o ya en Lyon, París, Milán o Hamburgo, deduciendo que la pequeña de las drogas formaba parte de las “industrias” clave de mi Ciudad… y sumada a la COCAINA Y HEROÍNA (leer ¡si pueden y la CENSURA lo permite! en www.lagrancorrupcion.com “OP.TACOS” Y “COCAÍNA Y BCN”) sobrepasarían la del automóvil, sin alcanzar a la CONSTRUCCIÓN, quizá superada tras el estallido de la BURBUJA, y generando por sus márgenes y liquidez un gran efecto multiplicador. A tenor de los más de 5.000 presos en Cataluña (y las decenas de miles por la gran rotación de las pequeñas condenas por hachís) no es disparatado pensar que la nómina del inexistente epígrafe fiscal “drogas ilegales al menor y mayor” sobrepase los 50.000 individuos directos y varios cientos de miles mezclados consumidores y pequeños camellos. Una nómina muy especializada para que ningún turista se vaya sin la oportunidad del consumo y “recuerdo”, además de alcanzar cualquier rincón de EUROPA, incluidos colegios.
Como anillo al dedo el mail recibido hace un par de días referente a la Corrupción en Cataluña…
¿No será que Cataluña ya la tienen casi completamente controlada, los corruptos políticos, cada uno con su parcela de poder? Y desde España no se puede hacer nada contra este Paraíso de la Corrupción, con buenas relaciones con las mafias que lavan su dinero…
He de advertir que ni Marruecos, ni productores y traficantes, exceptuando los que cumplen condena, son partidarios de la legalización… se acabaría el gran negocio. Coinciden con todos los gobiernos, tan dados a prohibir… y rentabilizar prohibiciones. Y retorciendo el sentido del artículo sobre CALIFORNIA es probable que en Barcelona, sin legalizar, la DROGA, por desgracia, contribuya en un no valorado pero enorme porcentaje a PALIAR LA CRISIS. Clicar en “trafico de drogas en Barcelona” o “consumo de drogas en Barcelona”.
Ver en www.lagrancorrupcion.blogspot.com
15-08-09
EL CONFIDENCIAL
Fumar ‘hierba’ puede salvar a California de la bancarrota
Arnold Schwarzenegger, marihuana, California, crisis
@Roberto Arnaz. Los Angeles.- 15/08/2009 6:00h
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¿Será la marihuana la solución a los problemas de Arnold Schwarzenegger? Al menos así lo cree Marijuana Policy Project, un grupo de activistas en defensa de la legalización del cannabis que se ha propuesto hacerle el trabajo más fácil al Gobernador de California, incapaz de ponerle freno a la crisis presupuestaria del Estado, que acumula una deuda de más de 26.300 millones de dólares.La asociación, con un amplio respaldo ciudadano y que cuenta con importantes apoyos políticos en el parlamento estatal, ha lanzado este verano una polémica campaña televisiva con la que pretenden reabrir el debate en torno a la legalización del cannabis con fines lúdicos.
El spot, de sólo 30 segundos y que se ha emitido en más de 200 ocasiones recientemente en televisiones locales y nacionales de California, ha levantado una enorme polvareda, hasta el punto de que algunos canales se han negado a reproducirlo, entre ellas KABC-TV de Los Ángeles o la KGO-TV de San Francisco.
“El gobernador ignora a miles de californianos que quieren pagar más tasas. Somos consumidores de marihuana y los impuestos derivados de su legalización podrían pagar el salario de 20.000 profesores”, afirma Nadene Herndon, jubilada de 60 años, trabajadora estatal y protagonista del anuncio televisivo más polémico del verano.
La referencia a la situación del profesorado no es casual. La falta de fondos públicos ha obligado a “governator” Schwarzenegger a tomar las primeras medidas de ahorro, que, de momento, se han cebado con la educación. Los primeros perjudicados, los niños californianos y sus sufridos padres: el año que viene su curso escolar tendrá una semana menos. Con esta impopular decisión el estado espera ahorrar 5.300 millones de dólares en los salarios de los docentes y el mantenimiento de los centros. Si no surte efecto, la sanidad será la siguiente en recibir el tijeretazo.
Para evitar recortes aún más traumáticos, Marijuana Policy Project quiere proponer que se grave con 100 dólares la producción de cada dos onzas de marihuana –aproximadamente 60 gramos-, cuyo valor en la calle podría rondar los 800 dólares. “De esta manera, no solo se podrían recaudar más de 1.500 millones de dólares extra cada año, sino que, además, se ahorrarían los más de 1.000 millones que actualmente se invierten en la lucha contra los pequeños delitos relacionados con la marihuana”, explica Tom Ammiano, uno de los políticos regionales que apoya la propuesta.
Sólo en julio y agosto, tres nuevas iniciativas se han sumado a la de Marijuana Policy Project para lograr que el consumo de marihuana sea legal para mayores de 21 años a partir de 2010, según los datos recogidos por la oficina del Fiscal General del Estado.
Más dispensarios de marihuana que Starbucks
Hasta el momento, Schwarzenegger simplemente se ha limitado a decir que ve con buenos ojos “que se abra un debate sobre nuevas fórmulas que aporten ingresos adicionales”. Sin embargo, parece que los ciudadanos lo tienen claro. Las últimas encuestas publicadas por medios estadounidenses afirman que el 56% de los californianos estaría de acuerdo con la despenalización del consumo de cannabis. Algo que no es de extrañar, si se tiene en cuenta que California es el estado número uno en cuanto a producción de marihuana, con casi 4.000 toneladas (casi el 40% del total del país), que allí reside el 13% de los consumidores habituales de todo el país y que conviven con su uso legal con fines médicos desde 1996.
El mercado de los ‘porros’ medicinales mueve al año cerca de 15.000 millones de dólares y deja en las arcas estatales cerca de 3.000 millones en concepto de impuestos. Los Ángeles se ha convertido en la capital californiana del consumo legal de cannabis. En los últimos dos años se ha disparado el número de ‘doctores marihuana’, como se conocen popularmente a los establecimientos que distribuyen dosis bajo prescripción médica, que han pasado de 183 a más de 800 desde 2006.
“En Los Ángeles ya hay más dispensarios de marihuana que cafeterías Starbucks” afirma Mehmet Balkary, un estudiante turco de 31 años. Lo que más sorprendió a Mehmet cuando llegó a Santa Mónica hace un año es la facilidad con la que se pueden conseguir unos cogollos de marihuana y la permisividad por parte de las autoridades. “Basta con ir al médico y decir que tienes jaquecas o estrés por el trabajo o la universidad”, asegura, “aunque es algo caro”, se lamenta.