«Hola a todos, como sabéis desde Presidencia del Gobierno se está coordinando la elaboración de la Ley de Economía Sostenible anunciada por el Presidente en el debate sobre el Estado de la Nación». Así comienza el correo electrónico donde se resume el contenido de una reunión del pasado 2 de julio, en la que se convocó a 12 ministerios para elaborar el anteproyecto. La reunión estaba presidida por José Enrique Serrano, jefe de gabinete de Presidencia, y José Manuel Campa, secretario de Estado de Economía.
Por si quedaba duda, se deja muy claro que las instrucciones llegan directamente de Moncloa. «Os resumo algunas de las indicaciones que se han recibido de Presidencia sobre la LES (ley de economía sostenible), explica en la cabecera del correo una de las participantes en el comité de redacción de la ley.
La ley «tiene que estar aprobada y publicada el 31 de diciembre de 2009». «Debe ser aprobada en Consejo de Ministros una semana antes del APL PGE (anteproyecto de los Presupuestos) 2010: fecha tope 17 de septiembre 2009», se subraya. Se añade que se verá en los Consejos de mediados de agosto (el 13 de este mes) y en sucesivos hasta el 17 de septiembre.
Fijado el calendario, aparece el primer «como sea», que si bien no es literal, se acerca mucho: «Con motivo de este calendario tan apretado, deben evitarse contenidos que exijan informes preceptivos o dictamen del Consejo de Estado. Esto nos complica la incorporación de propuestas que exijan tramitación medioambiental o dictamen del CE por ser ejecución de Derecho comunitario (Pesca IUU y Estrategia Marina)».
Sobre el contenido de esta ley, Presidencia lo ha agrupado en dos bloques: uno de medidas «estructurales» -«no se trata de una nueva ley ómnibus, que agote el programa de la legislatura, sino de incorporar los elementos transversales que orienten la actividad pública y privada hacia el cambio del modelo productivo»-, y otro de medidas fiscales e incentivos.
«Esa ley va a tener un contenido denso, importante trascente», dijo Zapatero en mayo
El Gobierno no tiene nada claro que la ley vaya a contar con financiación propia, algo básico en una norma de estas características. Primero se explica que «se constituyen los dos fondos anunciados por el presidente en el debate sobre el estado de la Nación: Fondo de economía sostenible, dotado con 20.000 millones, y Fondo de inversión local, algo más condicionado que el de 2009, dotado con 5.000 millones». Dicho esto se introduce un matiz entre paréntesis, que no es menor: «(El secretario de Estado de Economía hizo varias referencias a la neutralidad presupuestaria, no quedó del todo claro si habrá o no financiación adicional o la dotación de los Fondos será el resultado de minorar otras partidas)».
«El tema fiscal no toca»
En el correo se adjunta una nota sobre la reunión del 10 de julio en Presidencia, con las instrucciones del jefe de gabinete de Zapatero. «El tema de instrumentos fiscales no toca todavía, lo veremos más adelante», se subraya.
Otra instrucción clarificadora: «Se considera la ley más importante de la legislatura, por lo que se pide un esfuerzo de imaginación y que se realicen propuestas innovadoras que vayan más allá de lo que ya está propuesto, programado o en marcha».
Cuando haya problemas competenciales con las Comunidades, la solución es tan simple como ofrecer la financiación aunque no corresponda hacerlo: «Tener cuidado con los problemas competenciales con las CC.AA. si hay temas que interesen y puedan tener este tipo de problemas estudiar las posibilidades en el ámbito de la cooperación administrativa, ofrecer la financiación si se aceptan las normas aunque no sea competencia de la AGE (Administración General del Estado)».
«Todo es urgentísimo»
Una advertencia más: «Que se envíen medidas concretas y articuladas, no derecho líquido o filosofía». «Dados los plazos con que contamos todo es urgentísimo...», se afirma en el correo, cuya despedida también es desconcertante: «Cualquier duda, me preguntáis y casi seguro que no tendré respuesta, pero me encargaré de buscarla».
La ley de Economía Sostenible fue una de las promesas de Zapatero en el debate sobre el estado de la Nación. Éste era su compromiso: «Prondremos un acuerdo sobre el contenido de la ley de Economía Sostenible en la mesa de diálogo social para abordar el nuevo modelo de crecimiento de la economía. Va a ser una ley que afecte a temas esenciales para el futuro de la economía, fiscales, presupuestarios y energéticos, de gran calado», dijo Zapatero.