Mario Conde
13 de mayo, 2010
Doy por cierto que Obama, el presidente de EE.UU, ha llamado a nuestro Presidente Zapatero, porque no queda mas remedio que atribuir veracidad a un comunicado oficial de la Casa Blanca. Igualmente debo admitir que el contenido del mensaje se circunscribía en esencia a asuntos económicos, algo así como una especie de admonición de “ponga su casa en orden para no perjudicar a los demás”. Pero aún admitiendo la certeza no me queda mas remedio que preguntarme el porqué de semejante llamada y, adicionalmente, las razones para dotarla de publicidad urbi et orbe. Decir que España ha pasado a ser un protectorado americano puede ser ocurrente, pero con eso seguimos sin entender gran cosa.
¿Se produce la llamada por alarma ante el volumen de Deuda Pública española? No creo, porque, aún estando mal, nuestros niveles de endeudamiento público, contando con el Estado y demás Administraciones Públicas, no son los peores del UE. Como ya he dicho en este blog en varias ocasiones, el problema no es lo que deben las Administraciones Públicas sino la capacidad de devolver lo prestado, el saber de dónde van a obtener el dinero para ello, pero aún en ese caso, dispongo de datos que me indican que el total de la deuda del llamado Club Med para con bancos franceses y alemanes -que son los que mandan- no sobrepasa los 100.000 millones de euros. Ya se que es una barbaridad de dinero, pero nuestros problemas financieros son superiores a esas cifra. Así que no lo creo.
Casualmente a los dos días de la llamada en cuestión se presenta un programa especial de reducción de déficit público en el que todo el protagonismo lo asume el Presidente Zapatero. Pero dudo mucho que la llamada de Obama tenga que ver con la reducción del sueldo a los funcionarios españoles, la congelación de las pensiones, el cheque bebé o el racionamiento de medicamentos. Son temas importantes, claro, y que debieron abordarse mucho antes, pero no suficientes para esa singular comunicación telefónica.
Estas medidas, que, como digo, son lógicas, recortarán déficit pero sobre todo servirán para poner de manifiesto si el modelo de Estado del que nos hemos dotado, si la estructura de la Administración Autonómica actual, es una rémora o un incentivo, si ayuda o impide el despegue económico y social en momentos de penuria en ambos aspectos. Yo tengo claras mis ideas al respecto, y las he expuesto en público. Ahora veremos si las autoridades autonómicas están por colaborar, si deciden participar en el principio de solidaridad, o si, al final, cada uno barrerá para su casa alegando argumentos y excusas de estirpe variada.
Pero lo más llamativo es que el Presidente Zapatero en estas circunstancias se atreva a esas dos medidas consistentes en recortar sueldo de funcionarios y congelación de pensiones. Digo esto porque siempre se ha dicho que se trata de medidas de negativo impacto electoral, dada la sensibilidad cualitativa y la importancia cuantitativa de los colectivos afectados. Alguien mal pensado podría decir: qué mal deben estar las cosas cuando no ha tenido más remedio que hacer algo que puede costarle las elecciones, y que lo haga en un momento en el que las encuestas del CIS le dan una distancia con el PP difícilmente comprensible en las actuales circunstancias.
¿Y que es lo que puede ir tan mal para justificar esa llamada?. He hablado con el profesor Calaza, que se encuentra en País. Es hombre de verbo, pluma y juicio directos. El problema, me dice, no es la deuda pública, sino la privada. La deuda privada con el exterior de entidades financieras, no financieras y particulares españoles es mas del doble de la deuda pública total. Así que Deuda Pública y deuda privada con el exterior suman 1.8 billones de euros. Pero son billones castellanos, es decir, de los de verdad, no de los anglosajones, que son mil veces menos. Y una cifra semejante es para poner nervioso a sus tenedores, es decir a los acreedores. Se trata sustancialmente de bancos europeos. Podría ser cierta la tesis de que la presidenta alemana y el presidente francés han pedido a Obama que llame al presidente Zapatero para decirle que si falla la deuda privada el efecto dominó arrasa con el sistema financiero en su conjunto. Podría ser. Atención a la deuda privada española con el exterior. Podría ser clave.
Me envía un mail aclaratorio el profesor Calaza en el que me indica: Si por países del Club Med entendemos España, Grecia y Portugal –en realidad hay que añadir también Italia e Irlanda- la deuda pública de ese trinomio en manos de bancos franceses y alemanes es 160.000 millones de euros.
La deuda externa de España, pública y privada, en manos de bancos alemanes es de 260.000 millones de euros y de 200.000 millones en manos de bancos franceses. El resto, hasta 1,8 billones de euros está en manos de otros agentes como compañías de seguros o fondos de pensiones, además de bancos norteamericanos, japoneses, ingleses (120.000 millones de euros) etc (y ahora también en manos del BCE que ha empezado a comprar deuda griega y española).