07/02/2009
La actuación, que tiene un presupuesto de 1.629.624 euros, mejorará las condiciones de circulación e incrementará la seguridad de una vía por la que circulan más de un millón de conductores anualmente
Las obras canalizarán la circulación del tráfico procedente de las industrias agropecuarias, el Museo del Campo de Cartagena y el Centro de Transportes de Mercancías de Roldán
La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, a través de la Dirección General de Carreteras, llevará cabo el acondicionamiento y reordenación de los accesos de la carretera RM-F21, que comunica la autovía de Madrid (A-30) con la pedanía de Roldán por los Martínez del Puerto, continuando hasta Torre Pacheco, una actuación que supondrá la eliminación de un Tramo de Concentración de Accidentes.
La obra, que tiene un presupuesto de 1.629.624 euros y será adjudicada a lo largo del próximo trimestre, mejorará las condiciones de circulación e incrementará la seguridad de una vía en la que se registra el desplazamiento de más de un millón de conductores anualmente y que supone un itinerario de gran relevancia para la pedanía de Roldán en su comunicación con uno de los ejes viarios más importantes de la Región.
El director general de Carreteras de la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José Guijarro, resaltó “el gran interés de esta actuación, ya que las obras mejorarán la circulación del tráfico procedente de las industrias agropecuarias, el Museo del Campo de Cartagena y el Centro de Transportes de Mercancías de Roldán”.
Las obras supondrán la remodelación del trazado y de las intersecciones existentes, dotándolas de carriles centrales de giro a la izquierda y de cambios de velocidad para facilitar los desvíos a la derecha.
“De esta forma, añadió Guijarro, evitaremos al máximo la aparición de nuevos accidentes, uno de los objetivos prioritarios del Gobierno regional, que está trabajando en la eliminación de los ‘puntos negros’ a través de diferentes medidas como la rectificación del trazado de la carretera en aquellos tramos que lo requieren, la instalación de farolas ‘antichoque’ que minimizan las lesiones en caso de accidente, el extendido de un tipo especial de pavimento antideslizante que reduce los accidentes por deslizamiento en un 70 por ciento o la colocación de barreras de protección para motoristas”.
“Se trata de reforzar la seguridad vial en aquellos tramos considerados de riesgo, protegiendo a los colectivos más vulnerables, como pueden ser los motoristas o los peatones, haciendo uso de todos los medios disponibles para mejorar las condiciones de circulación y garantizar, de esta forma, la máxima seguridad vial en la Red de Carreteras de la Región de Murcia”,concluyó Guijarro.