Ángel Tejedor
Los tres ataques sufridos en menos de una semana por las tropas en Afganistán han acabado por minar su moral. Coroneles, sargentos, comandantes... Todos señalan en la misma dirección.
Amordazados como lo están por sus superiores -con Carme Chacón y José Luis Rodríguez Zapatero a la cabeza-, los militares españoles han encontrado en Internet una forma de desahogarse sin sufrir represalias, dado el anonimato que les concede la red de redes. Los últimos ataques sufridos por las tropas destinadas en Afganistán y el empecinamiento del Gobierno en no reconocer que se enfrentan a una guerra ha acabado por minar su moral. El presidente que llegó a La Moncloa con la pancarta del "No a la guerra" y que retiró las tropas de Irak, y la ministra "pacifista" no pueden hacer tal cosa.
Zapatero y Chacón siguen negándose a
reconocer que Afganistán está en guerra,
pese al clamor militar.
El principal foro del Ejército (http://www.militar.org.ua) echa humo desde la semana pasada. Coroneles, sargentos, comandantes, soldados, suboficiales, subtenientes... se han lanzado a Internet para colgar reveladoras fotografías y denunciar lo que ya denunciaron el pasado viernes la Asociación Unificada de Militares Españoles y la Asociación de Militares Españoles: que la misión en suelo afgano no es precisamente "de reparto de caramelos" y que faltan medios humanos y materiales. De hecho, en el combate que libraron el pasado jueves durante seis horas los españoles necesitaron el apoyo de varios helicópteros italianos.
"Sea cierto o no, cada vez que se sufre un ataque en Afganistán se habla de enemigos, insurgentes, emboscada, bombardeo, apoyo aéreo, y otras muchas palabras claramente guerreras, y únicamente nos negamos a considerarla una guerra por la insistencia de nuestro Gobierno en negarla, sin embargo la mayoría de los países de nuestro entorno aun llevando a cabo misiones similares a las nuestras sin la consideran como tal"; "España, que se fue a la guerra feliz y confiada de que le daban una provincia tan tranquila que era más o menos como Disneyland, donde poder hacer el papelito de que cumplimos, de que estamos con nuestros aliados y tal y tal, pues ahora toca agarrarse los machos"; "Así no se va a ningun lado. Este Gobierno (como el anterior) nos trata como primos aunque afortunadamente hay gente que está informada de lo que realmente está pasando en Afganistán. Es hora de que ya se hable claro, que ESPAÑA ESTÁ INMERSA EN UNA GUERRA y que como tal hay que aumentar el contingente y el material para COMBATIR contra los talibanes";
"De verdad que lo de este Gobierno no tiene ni pies ni cabeza. Afganistán, que es la misión con diferencia más peligrosa en la que están inmersas nuestras tropas, es la segunda misión en cuanto a número de soldados, siendo LÍBANO la primera (no cuento obviamente el batallón electoral mandado). ¿Pero qué le pasa a este Gobierno por la cabeza? Con los soldados españoles que tenemos desplegados en Afganistán somos incapaces de controlar nuestra zona y con suerte somos capaces de defendernos. Tienen que venir tropas italianas y americanas a patrullar nuestra zona por falta de efectivos. Esto es de vergüenza"; "¿Sabe alguien si la ministra se está medicando? ¿O es tan sumamente cretina que cree que nos chupamos el dedo?"; "Propongo realizar una colecta. Yo pongo los primeros 100 euros. Para enviar a Afganistán a uno de estos (en relación al Gobierno) un mes, para que si vuelve les explique a los demás si es guerra o nos toma el pelo"; y "lo del atentado de Barajas fue un ´accidente´, no un atentado, lo de Afganistán siguiendo la misma lógica es un ´accidente en cadena´, no una guerra".
Son sólo algunos de los muchos mensajes que estos días han ido dejando los militares, varios con experiencia en alguna de las dos provincias con presencia española: Herat y Badghis. El despliegue español en el país para colaborar en la reconstrucción se remonta al año 2003, aunque fue a partir de 2006 cuando el contingente empezó a sufrir ataques directos. Ataques que ya se han cobrado la vida de seis soldados españoles y que, tras las elecciones afganas, se han intensificado.
Tres ataques en menos de una semana así lo atestiguan, y han llevado al Ejecutivo a tomar la decisión de enviar 200 efectivos más, que se sumarán a los 780 ya desplegados (sin contar los 450 del batallón electoral, que regresarán muy pronto a casa). Los populares apoyan este refuerzo, pero consideran que debería ser Zapatero y no Chacón quien comparezca en el Congreso para explicar las circunstancias. Y sobre todo le piden al presidente lo que ya es un clamor entre los militares: que les diga a los españoles "la verdad" y deje de referirse eufemísticamente a una "misión humanitaria" que no es tal, en palabras de Mariano Rajoy.
