28.02.2009 - ALEXIA SALAS | SAN PEDRO
Ya advirtió de que rompería su silencio si le dejaban de nuevo en minoría en el ruedo municipal, y lo ha hecho. El alcalde, José María García Ruiz, calificó ayer de «vergonzantes» y «surrealistas» las declaraciones del secretario general del PSOE local, Francisco Molero, uno de los cuatro ediles díscolos que volvieron a dejar anteanoche su silla vacía en el Pleno y, por tanto, en minoría a su Gobierno frente a las embestidas del PP en la oposición.
El alcalde cree que "atentan contra la voluntad de todo un pueblo y ponen en duda la esencia de la democracia quienes dicen que son socialistas». Considera que los cuatro concejales «sólo quieren mi cabeza». En el fondo de la marea, García Ruiz cree que «pensaban que yo era lelo, que me podían manejar, y presentarse a unas elecciones es suficiente para que nadie te maneje, porque mientras yo esté ahí nadie gobernará por la puerta de atrás, sino pasando por las urnas». Lo que más le duele es que «han tratado de desprestigiarme, de hacerme pasar por corrupto, pero la gente me conoce».
Mientras tanto, ninguno de los cuatro ediles respondía ayer a las llamadas para conocer sus planes en el Ayuntamiento. Fuentes cercanas a los concejales enfrentados al alcalde indicaron ayer que estudian mantener su acta de concejal, aunque figuren como ediles no adscritos, si el PSRM-PSOE adopta medidas disciplinarias contra ellos.
El alcalde lanza un mensaje a quien «ha echado gasolina al fuego, que tal vez ahora no le queden extintores», en referencia a la vieja guardia del PSOE local, que ha respaldado a Molero en su enfrentamiento. Sobre lo que considera «un acto de indisciplina» de los cuatro ediles, sobre todo los dos con delegaciones que suman ya dos ausencias a plenos, piensa posponer su decisión a la próxima semana. «Lo trataré con el grupo y con la Ejecutiva regional, que me apoya y así me lo ha transmitido», afirma el regidor. leer + >>>>>
No hay comentarios:
Publicar un comentario