05/10/2010 | 13:01
El fútbol es un deportes de riesgo y sino que se lo pregunten a Daniel Cartagena. El rival político de Evo Morales recibió una patada del mandatario en toda la entrepierna, fruto del enfado del presidente por una entrada anterior de Cartagena.
Era un partido amistoso entre políticos, pero terminó con ambos políticos lesionados, de hecho Morales tiene baja médica para al menos tres días.
La mala relación entre ambos viene de atrás y así se demostró. El defensa de la Alcaldía y miembro del partido Movimiento Sin Miedo (SMS), Daniel Cartagena, mantiene una tensa relación con el partido Movimiento Social al que pertenece el presidente.
"Pasé el balón y recibí, de repente, una patada y no fue la primera vez que eso se produjo", señaló Morales cuando terminó el encuentro. Por su parte Cartageno dijo que no tenía intención de lesionar al líder opositor.
El defensa denunció tras el encuentro que había recibido amenazas de que iba a ser detenido, el alcalde Revilla tuvo que intervenir para evitarlo y argumentó que lo ocurrido en la cancha era producto de un partido de fútbol.
El partido era todo un clásico y los aficionados de La Paz estaban ansiosos por ver a los equipos del alcalde Luis Revilla, del Movimiento Sin Miedo (MSM), y del presidente Morales, del Movimiento al Socialismo (MAS), partidos políticos fuertemente enfrentados.
Era un partido amistoso entre políticos, pero terminó con ambos políticos lesionados, de hecho Morales tiene baja médica para al menos tres días.
La mala relación entre ambos viene de atrás y así se demostró. El defensa de la Alcaldía y miembro del partido Movimiento Sin Miedo (SMS), Daniel Cartagena, mantiene una tensa relación con el partido Movimiento Social al que pertenece el presidente.
"Pasé el balón y recibí, de repente, una patada y no fue la primera vez que eso se produjo", señaló Morales cuando terminó el encuentro. Por su parte Cartageno dijo que no tenía intención de lesionar al líder opositor.
El defensa denunció tras el encuentro que había recibido amenazas de que iba a ser detenido, el alcalde Revilla tuvo que intervenir para evitarlo y argumentó que lo ocurrido en la cancha era producto de un partido de fútbol.
El partido era todo un clásico y los aficionados de La Paz estaban ansiosos por ver a los equipos del alcalde Luis Revilla, del Movimiento Sin Miedo (MSM), y del presidente Morales, del Movimiento al Socialismo (MAS), partidos políticos fuertemente enfrentados.
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