¿Cómo será tu piel de madrugada…
olerá a mar, tendrá el sabor
acaso de las olas?
¿Cómo será tu piel de madrugada…
húmeda, tierna, somnolienta;
el dulce mapa de la espera
y el deseo?
olerá a mar, tendrá el sabor
acaso de las olas?
¿Cómo será tu piel de madrugada…
húmeda, tierna, somnolienta;
el dulce mapa de la espera
y el deseo?
¿Cómo será tu piel de madrugada…
hálito sutil y transparente,
perceptible apenas por el sensible
corazón que te adivina?
hálito sutil y transparente,
perceptible apenas por el sensible
corazón que te adivina?
¿Cómo será tu piel en el momento
en que no sueño, ni pienso, ni respiro
por otros poros que no sean los de tu cuerpo,
en otros sueños que no sean los de tu reino?
en que no sueño, ni pienso, ni respiro
por otros poros que no sean los de tu cuerpo,
en otros sueños que no sean los de tu reino?
“La gente suele sorprenderse al ver mi letra. Como soy bonita, dan por sentado que todo lo que hago es bonito. Les resulta raro que escriba como si tuviese un garfio por mano, del mismo modo que les sorprendería saber que tengo un garfio por corazón.”
— Las lecciones peligrosas, Alissa Nutting
“La gente suele sorprenderse al ver mi letra. Como soy bonita, dan por sentado que todo lo que hago es bonito. Les resulta raro que escriba como si tuviese un garfio por mano, del mismo modo que les sorprendería saber que tengo un garfio por corazón.”
— Las lecciones peligrosas, Alissa Nutting
“¿Desde cuándo se descompuso allá afuera y acá adentro…? Cuándo llovía en enero. Cuándo lloraba sin remedio. Cuándo el calor te bronceaba en noviembre y las aves desde cuándo se desorientan sin saber si emigrar o quedarse. Cuándo me daba miedo acercarme a tu calor sin saber si ir o quedarme. Cuándo la jacaranda florecía en septiembre y el frío te perturbaba en abril. Cuando me sentía medio día feliz y el resto sólo pensaba abrazarte… Desde cuándo el clima está loco por el humano. Desde cuando pierdo el juicio por ‘ese’ humano. Quizá todo colapsó desde que empecé a verte… Me hago responsable del cambio climático. Niego lo de quererte…”
— Clara Ajc
Siempre en las tardes de domingo,
le cuento a mis espacios
las historia de nosotros,
y sigo intentando que no se diluyan con el olvido,
que no se vaya el rastro de tu tacto
en mis espalda,
ni tu sonrisa de desayuno.
Se lleva egoísta el tiempo, los momentos que vivimos,
los vuelve ayer en segundos,
los vuelve incoloros,
los transforma en rasguños.
Pero, a mí los domingos me da con rememorar
los besos que dejaste en mi boca,
con tocarme las coincidencias
que hoy son mi salvavidas.
Y me da con contarle a lo que queda de ti -tan poco ya-
lo mucho que te quise aquella vez,
lo mucho que te quiero ahora
y lo mucho que probablemente te querré mañana;
aunque nuestra historia esté destinada
a ser guardada,
aunque no seamos más que un par de extraños con historia
aunque ,
no sucedamos más.
le cuento a mis espacios
las historia de nosotros,
y sigo intentando que no se diluyan con el olvido,
que no se vaya el rastro de tu tacto
en mis espalda,
ni tu sonrisa de desayuno.
Se lleva egoísta el tiempo, los momentos que vivimos,
los vuelve ayer en segundos,
los vuelve incoloros,
los transforma en rasguños.
Pero, a mí los domingos me da con rememorar
los besos que dejaste en mi boca,
con tocarme las coincidencias
que hoy son mi salvavidas.
Y me da con contarle a lo que queda de ti -tan poco ya-
lo mucho que te quise aquella vez,
lo mucho que te quiero ahora
y lo mucho que probablemente te querré mañana;
aunque nuestra historia esté destinada
a ser guardada,
aunque no seamos más que un par de extraños con historia
aunque ,
no sucedamos más.
