La Marina rusa busca un barco finlandés desaparecido

El carguero llevaba madera a Argelia y tenía previsto llegar el 4 de agosto

Los guardacostas dicen que han visto al ‘Arctic Sea’ cerca de Cabo Verde

Foto sin fecha del Arctic Sea, que navega con bandera de Malta. Foto: REUTERS

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EL PERIÓDICO
MOSCÚ

Barcos de guerra de la Marina rusa buscan sin descanso desde el jueves al carguero finlandés Arctic Sea, desaparecido a finales de julio en aguas del Atlántico, frente a las costas de Portugal. La misteriosa pérdida del barco ha dado paso a hipótesis como las de un acto de piratería o un secuestro de la mafia.
Los guardacostas confirmaron ayer que el carguero fue avistado cerca de Cabo Verde, como había indicado el diario Financial Times Deutschland en su edición on line. Viktor Matveyev, director de la armadora finlandesa Solchart Management advirtió hace unos días de que había indicios que apuntaban a un secuestro. La naviera es propiedad de tres ciudadanos rusos que residen en Finlandia; uno de ellos es el propio Matveyev.

BANDERA MALTESA / El buque desaparecido, de bandera maltesa y tripulación rusa, zarpó del puerto finlandés de Jakobstad el pasado 23 de julio, con un cargamento de madera valorado en 1,3 millones de euros, rumbo a Bejaia (Argelia), donde debía llegar el 4 de agosto.
Según el canal de la televisión finlandesa MTV3, los familiares de los 15 marineros rusos que componían la tripulación del buque están muy preocupados por su paradero, pero descartaban la posibilidad de que el barco hubiera naufragado. El tiempo ha sido bueno. No ha habido tormentas, no se han recibidos avisos de problemas o peticiones de socorro. Las anteriores informaciones confirmadas oficialmente que se tenían del Arctic Sea eran del 30 y el 31 de julio. La noche del 29 al 30 fue avistado al pasar ante las costas francesas. El 31, un avión de la guardia costera portuguesa lo vio navegar por el Atlántico.

INTERPOL / Según informó la agencia France Presse. el pasado día 3 la policía internacional (Interpol) informó a las autoridades británicas de que el barco había sido abordado el 24 de julio por un grupo de enmascarados cuando se encontraba en aguas de Suecia, en el Báltico. Los asaltantes estuvieron a bordo unas 12 horas. Luego se fueron, pero tal vez no todos, o quizá volvieron. No se sabe.
Los expertos sospechan que el carguero podría haber sido víctima de una acción de la mafia o de un nuevo tipo de piratería que operaría en aguas europeas. Pero esta segunda hipótesis tiene poca consistencia. «¿Por qué irían piratas convencionales tan lejos cuando tienen suficientes barcos a su alcance?», declaró a France Presse Mijail Voitenko, redactor jefe del boletín marítimo ruso Sovfracht. Según el periodista, este asunto huele a mafia y tráfico de mercancías. «La desaparición podría estar ligada a un intento de transportar secretamente mercancías que alguien no quiere que lleguen a su destino», afirmó.
Varios buques de guerra y dos submarinos nucleares de la Armada rusa participan en las labores de búsqueda del carguero por orden expresa del presidente ruso, Dmitri Medvédev, pero de momento no han podido localizarlo. Los buques de la Marina rusa cooperan con el Centro Estatal de Coordinación de Salvamento en el Mar y con organizaciones internacionales de vigilancia de la navegación marítima.