jueves, 5 de febrero de 2009

El marido de Alaska vuelve como Nancy Anoréxica


NÚRIA MARTORELL BARCELONA

Cantante, periodista, representante... Mario Vaquerizo es un tres en uno hiperactivo. Sorprendente. El espigado marido de Alaska está de promoción, a pesar "del triste momento" por el que pasa su grupo: Susie Pop, la "verdadera Nancy Rubia", de 34 años, murió el pasado noviembre. "Este tercer disco, Una cita con Nancys Rubias, se ha visto enmarañado con su pérdida, pero las personas mueren cuando se deja de hablar de ellas, y Susie llenó tanto nuestras vidas, que decidimos seguir por ella".
Nancy Rubias nació en el 2004. Su propuesta aúna electrónica, pop, dance y glam. Y desde el principio, el alter-ego de Vaquerizo, Nancy Anoréxica, ha sido el timonel. "Abogo por la delgadez extrema. Que te preocupes por tener un buen cuerpo no significa que estés enfermo --asegura--. No me creo tan importante que por decir que peso 60 kilos midiendo 1,80 influya en la gente; sería infravalorarla. Cuando dices lo que se supone que no debes decir, te tachan de delincuente. ¡La que se armó cuando dijimos que no tocábamos instrumentos! Lo mejor es ser sincero y rodearse de los mejores compositores, como Nacho Canut", la mitad de Fangoria con Alaska.
Vaquerizo asegura que "si quisiera tocar la guitarra, lo haría", pero prefiere "aprovechar el tiempo leyendo, escribiendo, durmiendo..." Y, de paso, seguir "alcanzando metas". "De pequeño quería ser como Travolta, cantante. Suerte que no lo hice, porque sería un niño repelente tipo Operación Triunfo, y no lo fui hasta los 33 años. A los 13 --prosigue--, quise ser periodista; logré matricularme y acabar la carrera, me puse a trabajar y acabé haciendo de representante de artistas como Elsa Pataky, aunque rompí con ella hace un mes, y de jefe de prensa de Leonor Walting y los grupos Dover y Fangoria". Por cierto, cuando conoció a Olvido Gara (el verdadero nombre de Alaska) tenía 25 años. Y se casó con ella en Las Vegas, vestido de Elvis Presley, "aunque con el tiempo, los gustos musicales cambian".
En Una cita con Nancys Rubias hay títulos chocantes como Carnicerías y peluquerías y estrofas algo inoportunas en estos tiempos de crisis: "Soy el rey del consumismo/ vivo para acumular..." "Las letras se hacen al margen de la situación social del momento --se justifica--, y nuestro objetivo no es dar mensajes. En todo caso, el que lanzaría es: ante la crisis, ¡vive!".






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Fuente: leido en :http://www.elperiodico.com 
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