sábado, 20 de febrero de 2010
DOCUMENTO HISTÓRICO SOBRE PEARL HARBOUR
Estas fotos fueron descubiertas recientemente
¿No es increíble que una película pueda durar tanto tiempo en una
cámara sin desintegrarse? Fantásticas fotografías tomadas hace 68 años. Probablemente, tendrás que ir a un museo para ver el aspecto
de una cámara Brownie, o coformarte con la fotografía de ella que te
pongo yo aquí; ésta es una cámara BROWNIE:
cámara sin desintegrarse?
de una cámara Brownie, o coformarte con la fotografía de ella que te
pongo yo aquí; ésta es una cámara BROWNIE:
FOTOS ALMACENADAS EN UNA VIEJA CÁMARA BROWNIE
Pensé que estas fotos serían muy interesantes; la calidad
es de 1941.
Fotos de Pearl Harbor almacenadas en una vieja cámara
Brownie, encontrada en un armario.
Y han sido reveladas recientemente.
ESTAS FOTOS SON DE UN MARINERO QUE ESTABA EN EL
USS QUAPAW ATF-11O.
¡CREO QUE SON ESPECTACULARES!
PEARL HARBOR
7 de diciembre de 1941
Pensé que estas fotos serían muy interesantes; la calidad
es de 1941.
Fotos de Pearl Harbor almacenadas en una vieja cámara
Brownie, encontrada en un armario.
Y han sido reveladas recientemente.
ESTAS FOTOS SON DE UN MARINERO QUE ESTABA EN EL
USS QUAPAW ATF-11O.
¡CREO QUE SON ESPECTACULARES!
PEARL HARBOR
7 de diciembre de 1941
Yo flipo con los catalanes, pero ¿de qué van?
Versión de la ranchera ‘Me gustas mucho’, de Rocío
Dúrcal, emitida por el programa de humor
Oregón Televisión de Aragón TV:
Dúrcal, emitida por el programa de humor
Oregón Televisión de Aragón TV:
“Yo no he perdido la esperanza
de abrir un libro de historia
y que cuenten la verdad.
Porque es que el Reino de Oregón
ahora dicen que no existió,
resulta que era catalán.
Hay que ver como son,
lo montan de cojón
Se inventan su versión,
punto final.
Yo flipo con los catalanes
Pero ¿de qué van?
Les jode mucho,
les jode el pundonor
ser solamente una provincia
del Reino de Oregón.
Les jode mucho,
les toca los collons
que fueran solo un territorio
del Reino de Oregón.
Hay que ver como son,
traducen la lección,
ahora los reyes son
Pere o Joan.
Escolta noi ¡Que jeta tienen!
No escarmeNtarán.
Les jode mucho,
les jode el pundonor
ser solamente una provincia
del Reino de Oregón
Les jode mucho,
les toca los collons
que fueran solo un territorio
del Reino de Oregón”
Aznar, insultante
Cristina Losada
Quien piense que fue Aznar el injuriado en esta historia, se equivoca y mucho: él ha sido el injuriador. Así contarán el episodio, qué digo, ya lo
están contando, quienes han hecho del odio a Aznar el fundamento de
sus actitudes políticas.
Una vez, en un tranvía de Varsovia, el filósofo Leszek Kolakowski escuchó la orden siguiente: "¡Avancen hacia atrás, por favor!". Aparte de los viajeros de aquel vehículo, parece que también oyeron y obedecieron la paradójica instrucción muchos pasajeros de la izquierda española. Sin embargo, ni el antifranquismo retrospectivo ni el republicanismo sobrevenido ni ninguna otra de las marchas hacia atrás que han emprendido nuestros regresistas desatan la furia de pasiones que concita la figura de Aznar. El paso del tiempo sólo las acentúa y así, en la Universidad de Oviedo, el ex presidente hubo de pronunciar una conferencia bajo un torrente de improperios, lo que afianza la sospecha de que la civilización se ha ido retirando de aquellas, otrora nobles, instituciones del saber.
A Aznar le llamaron terrorista y criminal de guerra y asesino, individuos que ingirieron sus primeras litronas con los aditivos intoxicantes que fabricó el PSOE para que las criaturas creyeran que el señor del bigote tiraba bombas para matar a niños en Bagdad y se relamía al hacerlo. Los reventadores del acto fueron, asegura El País, "un grupo de jóvenes", vaya la inocencia juvenil por delante, pero al igual que sus mayores son fieles a la perversa noción de que no hay más terroristas que aquellos que combaten el terrorismo. Si, como Aznar, son víctimas del terrorismo, con más motivo aún. Larga vida ha tenido aquella consigna –¡Vosotros, fascistas, sois los terroristas!– que resume el desorden moral de la izquierda ante el fenómeno del terror y, en particular, ante ETA.
Lejos de inclinar la cabeza y pedir perdón por existir, Aznar saludó a la hostil afición con un gesto que el periódico mentado califica de "insultante". Y es que para insultar, Aznar. Sus columnistas de guardia ya estarán afilando el cuchillo para resaltar cuán grosero fue el ex presidente y qué poco respeto mostró por la libertad de expresión de unos universitarios que ejercitaban su legítimo derecho a la crítica. Pues quien piense que fue Aznar el injuriado en esta historia, se equivoca y mucho: él ha sido el injuriador. Así contarán el episodio, qué digo, ya lo están contando, quienes han hecho del odio a Aznar y, en definitiva, del odio, el fundamento de sus actitudes políticas.
A Aznar le llamaron terrorista y criminal de guerra y asesino, individuos que ingirieron sus primeras litronas con los aditivos intoxicantes que fabricó el PSOE para que las criaturas creyeran que el señor del bigote tiraba bombas para matar a niños en Bagdad y se relamía al hacerlo. Los reventadores del acto fueron, asegura El País, "un grupo de jóvenes", vaya la inocencia juvenil por delante, pero al igual que sus mayores son fieles a la perversa noción de que no hay más terroristas que aquellos que combaten el terrorismo. Si, como Aznar, son víctimas del terrorismo, con más motivo aún. Larga vida ha tenido aquella consigna –¡Vosotros, fascistas, sois los terroristas!– que resume el desorden moral de la izquierda ante el fenómeno del terror y, en particular, ante ETA.
Lejos de inclinar la cabeza y pedir perdón por existir, Aznar saludó a la hostil afición con un gesto que el periódico mentado califica de "insultante". Y es que para insultar, Aznar. Sus columnistas de guardia ya estarán afilando el cuchillo para resaltar cuán grosero fue el ex presidente y qué poco respeto mostró por la libertad de expresión de unos universitarios que ejercitaban su legítimo derecho a la crítica. Pues quien piense que fue Aznar el injuriado en esta historia, se equivoca y mucho: él ha sido el injuriador. Así contarán el episodio, qué digo, ya lo están contando, quienes han hecho del odio a Aznar y, en definitiva, del odio, el fundamento de sus actitudes políticas.
Cristina Losada es uno de los autores del blog Heterodoxias.net.